Otoño es la época de las lluvias, hojas caídas en las calles y las carreteras. Unas condiciones que si no se controlan y no se tiene el coche en perfectas condiciones pueden provocar más de un susto al volante.
Con las lluvias y el asfalto húmedo, la distancia de frenado puede aumentar hasta el 40%. Además, es importante que tengas tu coche en buenas condiciones.
Es importante revisar el estado de los neumáticos, así como de las escobillas, la batería y los niveles de líquidos. Un fallo puede dejarte tirado en la carretera o provocar una avería mayor. En el siguiente artículo te contamos qué elementos debes tener en cuenta para el mantenimiento de tu coche en otoño.
Hay que mirar el tiempo
Uno de los contratiempos que puedes encontrarte en carretera es el mal tiempo. Lluvia, niebla… en otoño crece la probabilidad de conducir con estas condiciones. Por eso es importante que estés prevenido y sepas con qué te vas a encontrar. Además, aunque no llueva, es posible que haya charcos en la carretera, lo que aumenta el riego de aquaplaning.
Otro factor a tener en cuenta son las hojas. Si están mojadas, pueden crear el mismo efecto que el aquaplaning.
Ojo a la visibilidad
Como hemos dicho, el mal tiempo y la disminución de las horas de luz diarias pueden provocar alguna dificultad en tu conducción, lo que está directamente relacionado con tu seguridad y la de los demás. Si llueve, enciende las luces de cruce. Si el cristal delantero está empañado, enfoca la calefacción para que desaparezca el vaho.
También es importante tener los faros y los intermitentes bien limpios. Un alumbrado sucio puede reducir hasta un 50% tu visibilidad.
Con estos consejos para conducir en otoño podrás adelantarte a muchos contratiempos y evitar muchos inconvenientes tanto en carretera como con tu coche.
Fuente: eurotaller.com
